Resumen:
El estudio se origina a partir de la necesidad de incrementar el valor agregado a la cogeneración eléctrica fuera del período zafra, en centrales azucareros que procesen caña energética como biomasa combustible, y destinar sus jugos como componente de sustrato industrial para producir bioetanol y subproductos asociados, en la evitación de que se conviertan en un residual líquido agresivo al medio ambiente, al no ser viable económicamente producir azúcar y melaza con ellos. Se estimaron las incertidumbres de los microorganismos contaminantes en el sustrato, de variables fermentativas alcohólica y para el caso de la destilería Paraíso la de velocidad media de biosíntesis etanol; que fueron pertinentes para desarrollar las tecnologías de preparación con patente CU 23211 y de conservación con solicitud de patente de Adición OCPI 2007-0164, basadas ambas en la pasterización a alta temperatura por largo tiempo y mezcla con melaza de caña azucarera. Se ejecutaron evaluaciones industriales integrando central-destilería en la empresa azucarera Melanio Hernández donde se validó la tecnología patentada, se realizó la evaluación preliminar del impacto ambiental y se determinó la viabilidad técnico-económica del empleo de los jugos de caña energética. El estudio demostró las novedades científicas del hallazgo de un nuevo componente de substrato industrial para la fermentación alcohólica no reportado antes en lugar alguno, las tecnologías citadas, y el desarrollo de un programa informático de diagnóstico que facilita la generalización conservación de los jugos en cualquier central azucarero. Ello ha hecho posible que como fuente renovable de energía en Cuba, la caña energética tenga un rol protagónico como biomasa combustible sostenible por las rutas electroenergética y alcoquímica.