Resumen:
En el mundo unipolar y globalizado en el que vivimos, las fuerzas de la reacción
están empeñadas en borrar de nuestros pueblos todos los resortes morales e
históricos, que nos sirven de sustento para el enfriamiento de su veracidad. Por tanto
resulta necesario concretar acciones para conservar la diversidad creadora, las
identidades y educar al hombre en correspondencia con los valores que sustenta la
sociedad en que vivimos, ante un proyecto de globalización que no solo afecta la
economía sino también la vida espiritual