Resumen:
El proceso de formación de la personalidad concebida como la apropiación por el
individuo de la experiencia histórica social acumulada por las precedentes
generaciones se produce mediante dos formas básicas de relación: Del sujeto con el
mundo de los objetos, y del sujeto con el sujeto; Es decir mediante la actividad y la
comunicación.
La necesidad de comunicación tiene un carácter específicamente humano, se forma y
desarrolla en cada sujeto mediante las relaciones que establece con aquellos que le
rodean, así como con la actividad que realizan, de ahí que las raíces de la
comunicación se encuentren en la misma actividad vital material de los individuos. Las
relaciones del hombre tanto personales como sociales se ponen de manifiesto y se
realizan en la comunicación