Resumen:
La sociedad a escala mundial se desenvuelve en un proceso de constante cambio
y transformación. La realidad actual, caracterizada por su acelerado desarrollo
científico-tecnológico, exige ampliar al máximo las potencialidades humanas para
poder enfrentar el reto de un desarrollo sostenible. Se impone la necesidad de un
sujeto capaz de enfrentarse crítica e independientemente al proceso de
búsqueda, asimilación y transformación creadora.
Se requiere entonces de un ámbito educativo que responda a estas necesidades,
donde la forma de enseñar y aprender debe estar encaminada a preparar a las
nuevas generaciones, hay que enseñarlos a desarrollar mentes flexibles, capaces
de encontrar diferentes alternativas a una misma situación y a poseer inquietudes
investigativas. Es por ello que el trabajo pedagógico debe tener entre sus
objetivos fundamentales la formación y desarrollo de las habilidades intelectuales.
Visto así, el docente tiene que enseñar al alumno a aprender, a pensar
científicamente, viendo los fenómenos tal como se manifiestan en la naturaleza